Creo en ti, como creo en el sol que me da su calor,
Creo en ti, oh bendito Jesús, pues me das tu amor.
Creo en ti, porque sino creyera, mi alma huérfana fuera
Y en mi vida no habría, ni la luz, ni el amor.
Creo en ti Señor... creo en ti Señor a pesar de las dudas,
Creo en ti Señor a pesar de la ciencia, y a pesar de mi mismo
Creo en ti Señor, creo en ti si mi fe languidece
Cuando casi se extingue Señor, oh Señor creo en ti.
Creo en ti, aunque otros te nieguen
Y cual rebrobos vivan, oh Jesús creo en ti.
Creo en ti, al mirar las bellezas de tu magna creación
Creo en ti, cuando escucho el reír de tu gente feliz.
Creo en ti, si percibo las penas de los míseros parias
Que hasta ti se acercan en sus ansias de amor.
Señor, creo en ti Señor pues me diste tu mano,
Pues me diste tu mano cuando yo estaba solo en tan
Densas tinieblas, creo en ti Señor porque tú eres el fuego
Que calientas mi alma con tu amor sin igual.
Por todo esto Señor, creo en ti.
Creo en ti, aunque otros se burlen y un iluso me juzguen,
Oh Jesús creo en ti.
Creo en ti.
