La Demanda de Sandalio (Autor: Héctor Paúl Vanegas, colombiano)
Yo soy Sandalio Jiménez, varón y mayor de edad
Con mis papeles en regla y soy de esta vecindad
Ante ud mi señor juez, con respeto y dignidad
Por medio de este alegato me propongo a demandar
A mi vecino cercano que se llama juan Tomás
Porque me robó una vaca que yo tenía en mi corral.
Se la voy a describir y pruebo la propiedad
Es una vaca encerada, blancas las patas de atrás
Herrada con la pl que es mí cifra de marcar
Unos burros y becerrros y las vacas de ordeñar
El juez al ver el escrito, su frente empezó a arrugar
Y le dijo a don Sandalio vuelva mañana a firmar.
De palabra yo le digo que mande ud a requisar la casa de mi vecino
Porque con seguridad allá se encuentra la carne colgada en el topochal
Y no quiero que este robo se quede sin castigar.
Si señor estoy de acuerdo, ya lo mandaré a firmar
A que rinda indagatoria y a la cárcel va a parar.
El juez y su secretario al leer el memorial
Ordenaron enseguida la captura de Tomás
Al leerle la demanda después de hacerlo jurar
Negó que se había robado la vaca de ese corral.
Yo si mate aquella vaca, pues no lo voy a negar
Y fue porque me embistió estando entre mi solar
Yo la sentí a media noche y cuando la fui a espantar
Me tiro patas arriba y no me dejaba gritar
Yo saque mi navajita y la empecé a puñalear
Si la mate fue en defensa pa' no dejarme matar.
La carne yo la salé, no la podia 'esperdiciar
Y estoy dispuesto a entregarla si a mi me pagan la sal
Al otro dia fue al juzgado Sandalio con el mensua
El juez tenia la sentencia lista para ejecutar
Y encabezaba diciendo el secretario auxiliar.
Con la ley y autoridad este juzgado absuelve al enjuiciado Tomás
Por el robo de una vaca y que mato en su solar
La mato en defensa propia ya se pudo comprobar
Que se repartan la carne don Sandalio y don Tomás
Porque al pobre demandado le toco comprar la sal
Y no tuvo la intención de robarse ese animal.
Condénese al demandante, a cercar bien su corral
Para que sus vacas bravas no se metan al solar
Del vecino tan honrado y que no sabe torear
Que solo por su navaja no lo mato ese animal.
Sandalio muy disgustado, le dijo a la autoridad
Yo ya me lo imaginaba en lo que esto iba a parar
Que el diablo venga y me escupa con monedas de metal
Si al perdérseme otra vaca acudo a la autoridad
Más bien me pongo de acuerdo con mi vecino Tomás
A rebuscar mi tasajo en toda la vecindad
Y si acaso lo denuncian, ya tenemos que contar
Que eso fue en defensa propia pa' no dejarnos matar
De un goloso toro padre o una vaca de ordeñar
Que el dueño ponga la res, y entre nosotros la sal.
