Todo Cambió

Intentaré describir lo que siento espero Organizar bien mis pensamientos Es como si algo hubiera extraído el miedo y me envolvió. Como sentir por primera vez su aliento. Cuando lo vi, quedamos en silencio. No había un porqué ni siquiera lo intento Dar explicación a ese preciso momento En que todo cambió. Como agua inundó, todo. Hizo desbordar, todo. Como viento tiró, todo. De cabeza volteó, todo. Como fuego quemó, todo. Consumiéndolo, todo. Como luz iluminó, todo. Quitó toda obscuridad. La muerte, tendió lazos alrededor de mí, Ligaduras del infierno me arrastraban hacia el fin. Enredado en las olas de muerte, el miedo se apoderó de mí. Sin salida creí, la única solución morir, Y llegó, mi clamor a sus oídos, En mis angustia escuchó el dolor y el conflicto. Desde lo alto tronó, carbones, encendidos, cimientos conmovidos, Pisoteo al enemigo, un respiro, tomar aire, como si todo cobrara sentido. Mi necesidad apareció en mi camino. Me llevó de la mano a mi destino. Y enderezó, todo lo que se encontraba torcido. Lo que buscaba era lo merecido, condenado por mí mismo. A rescatarme vino, pero caí, del otro rendido, Estaba muerto pero ahora estoy vivo. Como agua inundó, todo. Hizo desbordar, todo. Como viento tiró, todo. De cabeza volteó, todo. Como fuego quemó, todo. Consumiéndolo, todo. Como luz iluminó, todo. Quitó toda obscuridad. Vi sangre derramada. Pero no la mía. Vi muerte consumada. Pero no la mía. Sobre sus espaldas cargaba mi pecado. Clavado de pies y de manos. Vi gracia abundante en ese madero. Vi gloria revelarse en ese madero. Palabras que se escuchan. El mundo temblaba. El velo se rasgaba. Y todo comenzaba. No hay palabras en la boca de un hombre tan grandes como esas; palabras que cambiaron la historia, palabras que penetraron corazones endurecidos, que trajeron a casa al enemigo, palabras que detuvieron en seco la obscuridad, acabaron con el destino inevitable del hombre y que dan esperanza completa, sólo dos palabras, dos: Consumado es. Palabras que hacen eco en la eternidad. Como agua inundó, todo. Hizo desbordar, todo. Como viento tiró, todo. De cabeza volteó, todo. Como fuego quemó, todo. Consumiéndolo, todo. Como luz iluminó, todo. Quitó toda obscuridad. Es que su amor es tan grande, tan profundo, tan alto, tan ancho, tan largo, su amor es, tú no lo puedes ni siquiera el concebirlo en tu mente, inentendible, inexplicable cómo él puede amar a alguien, a alguien así, a un pecador, a un hombre que está muerto, un hombre aborrecible, ¿Cómo puede él amar eso? Y sí, él nos pide que amemos, y puede transformar a la persona más odiosa y que más odia en la persona más amorosa y más amable, solamente con su poder, porque él nos amó cuando estábamos así, él nos amó cuando eramos sus enemigos para hacernos sus hijos, para transformarnos en su propiedad. Ahora somos suyos solamente por su amor, su amor lo cambió todo.